Temperaturas extremas y carretillas elevadoras
Algunos de los lugares de almacenamiento son, además,
espacios sometidos a temperaturas extremas para la conservación de productos en sectores como la alimentación o el farmacéutico. La actividad que lleva a cabo el ser humano en este tipo de entornos a menudo se convierte en una tarea peligrosa que le obliga a realizar su trabajo en condiciones de frío extremo con bruscos cambios de temperatura. Otro de los espacios de almacenamiento más comunes son las naves divididas en estanterías de grandes dimensiones, por cuyos pasillos los operarios deben conducir sus carretillas elevadoras con una precisión casi milimétrica para evitar choques que provoquen daños en la mercancía y, en casos extremos, personales.
La automatización de este tipo de procesos ha sido una palanca indispensable para incrementar la
protección tanto de personas como de mercancías en los ecosistemas industriales. Los sistemas automatizados de clasificación y agrupación de productos en cajas, y de enfardado y paletizado de mercancías reducen al mínimo la participación del ser humano y, por lo tanto, el riesgo de sufrir accidentes durante el proceso de manipulación de productos. Este tipo de soluciones cuentan con sistemas de visión artificial que permiten llevar a cabo una clasificación automatizada de productos con rapidez y eficiencia, mientras que los robots colaborativos, por su parte, incorporan funciones de seguridad avanzadas que permiten llevar a cabo el paletizado sustituyendo el clásico vallado por escáneres de seguridad certificada.
Una vez distribuidas las mercancías en cajas y éstas en palets, las enfardadoras y flejadoras automáticas dejan los palets totalmente preparados para su envío al cliente final, mientras que los diferentes
mecanismos automatizados de etiquetado garantizan una perfecta trazabilidad del producto como paso previo a su transporte hasta los puntos de almacenaje o distribución mediante sistemas de rodillos y cadenas, también automatizados.